Los madridistas de parquet hemos pasado una travesía del
desierto y hemos llegado a un oasis regentado por Pablo Laso donde se vive con
una relativa placidez los partidos cotidianos, pero donde escupiremos
el corazón por la boca cuando volvamos a jugar otra vez contra el Barcelona. La
pretendida crisis del equipo catalán no es tal, pues si hacemos caso a lo dicho
por Gramsi sobre el particular, lo viejo, el Barça, aún no ha muerto pero al
Madrid, lo nuevo, se le ve crecidito. En estos clásicos ortoseculares no predominan las defensas sino el lodazal,
parecen partidos del Cinco Naciones con el barro hasta donde más duele.
La peluca de Jovellanos
«¿Con que V. ya estará prevenido de su blondo pelucón para encasquetársele como los demás golillas? Pues, no señor: no se corte V. el pelo: yo se lo mando. Haga que se le ricen en la espalda como a los ministros del Parlamento de París, y comience a desterrar tales zaleas, que en nada contribuyen al decoro y dignidad de la toga.» El Conde de Aranda a Gaspar Melchor de Jovellanos
lunes, 10 de febrero de 2014
domingo, 9 de febrero de 2014
Corto por perezoso (V)
En la magnífica crónica de Manuel Jabois hoy en El Mundo sobre el paseíllo de la Infanta, nos enteramos que el grupúsculo Reconstrucción Comunista lamenta que Santiago Carrillo muriera en la cama sin pagar "por sus crímenes contra la clase obrera". Llega la Ley de Memoria Histórica 2.0. Esto Zapatero seguro que no se lo esperaba.
sábado, 1 de febrero de 2014
El adiós de Pedro J.
Dicen por ahí, a
mano izquierda, lejos, donde los chinos, que cuando el discípulo está preparado
aparece el maestro. Mi Bruce Lee fue de papel. Me tropecé con él en el otoño de
89 recién licenciado en la Universidad. Un
periódico salía a la calle y yo me internaba en El Mundo. Aquellos titulares
como bombas y aquel columnismo de trinchera conformaron, en la parte que dejan
los genes, mi perfil ciudadano. Mi largo periodo en el paro (yo soy de los que
se curtieron esperando uno de los 800.000 puestos de trabajo del Gonzalato, ¡cuidadito
gamonales!), el paro, decía, lo pase subrayando temarios de oposiciones y
devorando columnas de papel. Columnas de más o menos fuste, con más o menos
volutas, pero que con el tiempo se decantaron en tres órdenes fundamentales:
Umbral, Burgos y Albiac.
domingo, 26 de enero de 2014
Permítame, Alteza, que le hable de los vientos
Diálogo entre la pareja protagonista del Paciente Inglés (Anthony Minghella,
1996), enterrada dentro del coche durante una tormenta de arena en el desierto:
jueves, 23 de enero de 2014
Un roto o un descosido
Lo que no entiendo de este chiste del El Roto tan comentado (sobre todo
aquí
y aquí)
es qué separa el abismo si los dos antagonistas están en el mismo lado del precipicio.
Posiblemente en la otra parte se sitúe el autor junto a esa Neo Tercera España que a diferencia de
la antigua no toma un ángulo visual cenital, cercano y escrutador, con su punto
profesoral y pedante, sino uno a ras de suelo, pretencioso y lejano. Y así, al
Roto de la realidad no le separa el socavón sino la miopía.
jueves, 16 de enero de 2014
Vasco Núñez de Balboa y unos M&M's
Rajoy llegó a la
Casa Blanca a pasar la revalida de la
crisis con buenos números en la carpeta y tres facsímiles sobre la epopeya
española en América bajo el brazo y salió con una palmada en la espalda y unas
chocolatinas en el bolsillo. Estados
Unidos es un país serio y por hacer los deberes no te premian con un viaje a
Eurodisney. Pero la izquierda hinchó el pecho hidalgo por la descortesía de
Obama. Vasco Núñez de Balboa y M&M's no pueden colocarse en la misma
balanza. Y, claro, el progresismo estalló
en red. Que si los yankis son unos prepotentes, que si son unos incultos. Además,
Mariano queda como un servil. Si a algún español se le hubiera ocurrido celebrar un
congreso o montar una exposición sobre el descubridor del Pacífico en
Washington, no hubiera bajado de franquista
admirador de un genocida que no da de España una imagen de mucho progreso.
Pero el trueque tacaño de Obama ha blanqueado por unos pocos píxeles la figura
del coloso de Jerez de los Caballeros. Grandezas del antiamericanismo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)